Una mujer nunca puede tener demasiados pares de zapatos, pero desde luego no puede tener suficiente espacio para almacenarlos.

Tal fue el caso de la empresa de calzado de alta gama Stuart Weitzman, que había superado su espacio de showroom en la calle 57 West en Nueva York. Con el paso de los años, tanto el personal como la empresa habían crecido, el negocio se extendió a cuatro plantas y zapatos separados fueron apilados uno al lado del otro en los estantes de exhibición.

Ahora, gracias a una nueva sala de exposición de 15.000 metros cuadrados y la sede central en Madison Avenue, diseñado por TPG Architecture (Nueva York), la marca tiene espacio para crecer. "Habían conservado diseñador italiano Fabio Novembre para desarrollar su concepto de tienda, la característica más notable de los cuales fue un estante de exhibición Corian en forma de cinta que se mueve de forma fluida a través de la tienda", dice James Phillips, director a cargo, Arquitectura TPG.

Inspirado por ese elemento de la firma, los diseñadores crearon un nuevo sistema de visualización que aparentemente flota en frente de la sala de exposición paredes de cristal. Hecho de blanco superficie sólida, las cintas de correr a lo largo de las paredes largas con estantes de cristal flotando entre ellos.

La paleta de materiales unifica aún más el espacio y se nutre de colores de la marca, incluidas las columnas y paredes terminadas en yeso veneciano, pisos de porcelana y firma acento de color púrpura. Las alfombras de Edward Fields ayudan a definir las áreas de descanso, que se anclan en las tablas personalizadas. "Ellas ayudan a crear este nuevo concepto de tienda", dice Phillips.

Un diseño flexible, significa que múltiples implantaciones pueden ir en las salas de exposición más grandes, mientras que los clientes VIP pueden tener una sala de presentación privada. Una habitación de usos múltiples con zona de café o área de conferencias divide los ambientes de oficina y sala de exposición, y tiene capacidad para eventos, así como descansos del personal y reuniones informales. Este espacio también se encuentra el presidente ejecutivo y la próxima pasión del diseñador después de zapatos: tenis de mesa.

"Mr. Weitzman me desafió a un partido en su primera reunión ", dice Phillips. "En la oficina anterior, la sala de conferencias se creó con una tabla de tenis que funciona como una mesa de conferencias. Esta tradición continúa como una característica de la nueva oficina, así como una pelota de ping pong característica de la pared en la nueva zona de recepción. "

Estilo y funcionalidad se funden en un nuevo espacio de Stuart Weitzman.